jueves, 22 de abril de 2010

Rotting




Y los ojos ciegos de un millar de niños clamarán al cielo en silencio, con las uñas llenas de astillas y la voz quebrada...

Hoy, el día en el que el odio arrasó nuestras esperanzas, el día en que una mancha carmesí desdibujó tu cielo azul.

El amor es la última gota de sangre que no quiere caer mientras exprimes tus lágrimas. Es la última respuesta que nadie responde desgarrándose la garganta.

Hoy la dulce melodía de tu voz solo es el graznido de un cuervo.

Todas nuestras cosechas son ceniza... el viento solo tiñe de gris tus pulmones. Las miradas de odio marcan los minutos del reloj y cada segundo es una puñalada más en la espalda.

A cianuro sabe tu pelo, tus caricias son una lija que destruyen mi piel con suaves caricias rojas.

Hoy, el día en el que la felicidad se compra con tarjeta de crédito, el día en que soñar es la utopía.

Mientras, no dejas de lamerme, desnudando a la bestia.

Si ves que las yemas de tus dedos me queman, no te detengas, recorre todo mi cuerpo... Entre chatarra es más fácil olvidar. Me fugo de una prisión de mentiras. Y mis pasos se confunden con metralla...

La tierra de las promesas no lleva a ninguna parte.